Oradour-sur-Glane u Orador de Glana es una localidad y comuna francesa que se encuentra en el departamento de Alto Vienne, en la región de Lemosín (Francia).

La localidad original fue destruida el 10 de junio de 1944 cuando 642 de sus habitantes, incluyendo mujeres y niños, fueron masacrados por la compañía alemana de las SS. una nueva localidad fue construída después de la guerra al lado de la original, la cual se mantuvo como recuerdo de lo sucedido.

En los inicios de 1944, la división "Das Reich" de las SS se estacionó en el pueblo de Mountauban al norte de Tolouse para conseguir nuevo equipamiento y tropas entrenadas. Después del Día D en Normandía, la división siguió la orden de cruzar el país para parar el avance de los Aliados.

El 10 de Junio, el batallón de Diekmann acordonó el pueblo de Oradour-sur-Glane al haberlo confundido con el cercano Oradour-sur-Vayres, y ordenó a todos los habitantes del pueblo - y a cualquiera que se encontrase dentro o cerca de la ciudad- a reunirse en el pueblo, aparentemente para examinar sus documentos de identidad. Además de a los residentes del pueblo, las SS también detuvieron a otras seis personas que aunque no vivían allí tuvieron la desgracia de estar paseando en bicicleta por la zona cuando llegaron los alemanes.

Todas las mujeres y niños fueron llevados y encerrados en la iglesia, mientras el pueblo era saqueado. Mientras tanto, los hombres fueron conducidos a seis graneros y cobertizos donde las ametralladoras ya estaban posicionadas.

Según el relato de un supervivientes, los soldados comenzaron a dispararles en las piernas para que se muriesen lentamente. Una vez que las víctimas ya no eran capaces de moverse, los soldados cubrían sus cuerpos con gasolina e incendiaban los graneros. Sólo seis de los hombres escaparon, aunque uno de ellos sería visto más tarde caminando por una carretera hacia el cementerio y sería fusilado. Murieron 190 hombres.

Los soldados fueron hacia la iglesia a poner un artefacto incendiario. Después de que lo encendieran, las mujeres y los niños intentaron huír por las puertas y ventanas de la iglesia, pero fueron recibidos con disparos de ametralladora. 247 mujeres y 205 niños murieron en la matanza. Sólo dos mujeres y un niño sobrevivieron. Habían conseguido llegar a una de las ventanas de la parte trasera de la iglesía a 10 metros del suelo, viéndose obligados a saltar. Los soldados alemanes escucharon llorar al niño y éstos comenzaron a disparar contra ellos. Sólo sobrevivió una mujer, Margarita Rouffanche de 47 años, arrastrandose y escondiéndose en los arbustos hasta que fue rescatada por la noche. Otro pequeño grupo de veinte habitantes habían huído de Oradour-sur-Glane tan pronto como los soldados habían aparecido. Esa noche el resto de la aldea fue arrasada.

Pocos días después, a los supervivientes se les permitió enterrar a los muertos. Se encontraron con que 642 habitantes del pueblo habían sido brutalmente asesinados en cuestión de horas.

Adolf Diekmann afirmó que se trataba de una represalia por colaborar con los aliados.

Después de la guerra, el general francés Charles de Gaulle decidió que el pueblo nunca se reconstruiría. Al contrario, debería permanecer como un monumento a la crueldad de la ocupación nazi.

Actualmente todavía podemos ver las ruinas del antiguo pueblo a pocos kilómetros del nuevo.